22 de marzo de 2016

Todo a su tiempo

Quietud, a pesar de todo el viento
que sopla allí afuera,
quietud que adormece
sin importar la vida que nos rodea.

Estas ganas de vivir
en un permanente noviembre,
con todos sus atardeceres
y los fríos abrazándonos la piel.

¿Volverías a nacer si tuvieras opción?
Yo lo haría sin pensarlo,
y sin ver atrás diría
que todo ha valido la pena.

Sin cambiar nada, sin quejarme de nada,
sin arrepentirme de todo
volvería a vivir esta vida
que me ha dado tanto.

A veces los días no tienen sentido,
pero es sólo el presente que carece de etiquetas
para enseñarnos que no todo debe tener un nombre
y nada cambia con letreros sin sentido.

Vivir es amar y amar es vivir
cuando eres sincero contigo y con los demás,
pero todo puede cambiar en cualquier momento;
ríe, llora, muerde, odia y perdona.

Todo a su tiempo,
tiempo para ellos, tiempo para ti,
tiempo para aquello que te duele,
tiempo para todo.

¿Aprenderías a caminar nuevamente?
Vivimos sentados en esta vida
que necesita de caminantes
descubridores de nuevos caminos.

Que vuelva noviembre y se quede para siempre,
el frío nos hace buscar los brazos
de la felicidad anhelada,
felicidad marchita, felicidad prestada,
pero al fin alegría que nos alarga los sueños.

Todo a su tiempo.

No hay comentarios: